Un gigantesco vaso amarillo llama la atención de quien está de vacaciones y le muestra en su interior un bar para disfrutar de una relajante bebida en la playa y divertirse con la música del momento. La facilidad y rapidez de montaje que caracterizan nuestras estructuras ha permitido, a pesar de las imponentes dimensiones del vaso, montar el bar cada día en una localidad distinta.